El marcador final dirá que el partido entre Chelsea y Liverpool concluyó 4-4, y que los rojos quedaron eliminados. Sin embargo, este fue uno de esos partidos para grabar y volver a ver cada tanto, m{as all{a del resultado final.
Los de Rafa Benítez hicieron todo el desgaste físico y futbolístico para llevarse el pase a las semi-finales, pero el equipo de Chelsea se lo arrebató en cada ataque que concretaba.
A los 19´ Fabio Aurelio abrió el marcador para Liverpool y a los 28´ el español Xabi Alonso de penal estiró diferencias. Con ese resultado el Liverpool estaba a un gol de la hazaña. Treinta minutos y la llave abierta, ya se vislumbraba un partidazo. En la última del primer tiempo Peter Cech le sacó el 3-0 a Dirk Kuyt. Hay que destacar la actitud de Guus Hiddink quien a los 33 del primer tiempo metió mano y sacó a Salomon Kalou para poner ebn cancha a Nicolas Anelka.
La serie pareció comenzar a definirse cuándo a los 51´ Didier Drogba puso el descuento y a los 57´ Alex, al mejor estilo Roberto Carlos, empató para los blues que parecieron salir del vestuario con otra actitud.
El mundo se venía abajo cuándo Lampard lo dió vuelta. Restaban menos de 15 minutos y Stamford Bridge era una fiesta azul. Sin embargo los Reds tienen mística y a los 81´Lucas -rebote incluido- igualó 3 a 3. A los 83´ el holandés Kuyt marcó el esperanzador 4-3 que a la postre de nada serviría ya que a los 89´ nuevamente Lampard empató el cotejo.
El Chelsea hasta estas instancias siempre dá que hablar, pero cuándo tiene que mostrar que está para más, se cae como ya le ocurrió en varias oportunidades. Sin embargo, es la segunda vez que deja afuera al Liverpool y con otra cabeza en el banco de relevos puede ser este su año; no la tendrá facil, enfrente estará el mejor equipo del mundo hoy por hoy.
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